Splice

• Año: 2009
• Dirección: Vincenzo Natali
• Calificación: 2 bichitos

Una pareja de científicos, lindos, jóvenes y brillantes, se la pasan experimentando para la farmacéutica en la que trabajan; crean nuevas especies, híbridos deformes que no se sabe bien qué chota son, etc.
Sus jefes les piden que dejen de boludear y que hagan algo que genere guita, pero ellos son jóvenes idealistas, rebeldes y un poco loquitos. Su alta moral les lleva por un camino inmoral para lograr lo que para ellos es el éxito (que no es lo mismo que sus empleadores entienden como éxito). Combaten con experimentos no éticos la falta de ética de sus jefes, a los que sólo les importa la guita.
Se transforman así en dos jóvenes Frankensteins manipuladores de ADN que crean un híbrido (con el agregado de ADN humano).
El dilema moral se transforma así en el eje de esta historia que al final tiene poco de novedosa y mucho de pelotuda.
La minita es la más loca, aunque el chabón se termina garchando (o más bien, se deja garchar) por la criatura extraña que ellos mismos crearon.
Son genios científicos pero en el transcurso de la historia no se dan cuenta de muchas boludeces, realmente obvias, cosa que hace que el argumento sea un poquito absurdo.
La parte final, muy previsible, es además bastante boba, y parece tener dos objetivos claros: satisfacer al espectador (lo que termina siendo un abuso de recursos trillados) y proporcionar un final abierto (lo que en realidad suena más a «dejemos todo listo para hacer la segunda parte»).